La inoperancia de la democracia.

 

Es comprendida, estudiada y tomada como al mejor manera de relación social. Hay varios factores que así lo determinan. El pueblo actuando en su plenitud, sin distinciones, participa y como conclusión dice lo que quiere y desea. La Verdad de la teoría sobre la mesa y en los libros es aplastante, cierta e indiscutible.

Pero vayamos más allá, sinceremonos y veamos que no es el camino indicado pues en la practica no funciona. Me reitero, en la practica no funciona. Lo que vivimos aquí, primero no es una democracia, y segundo, aunque lo fuera, no merecería la pena. Sobre el papel puede resultar algo disonante, pero el poder decisorio del pueblo, escudo de la democracia, puede que sea el principio de su mal. Las primeras democracias, que nadie se olvide, no votaban todos los habitante, solo los afortunados privilegiados ciudadanos. Inteligentes e interesados en el funcionamiento total el correcto a nivel social por su propia interés como parte formativa e incluida en las decisiones.. Ahora, solo se actúa por intereses personales y el pueblo siempre es malformado por un motivo grande de cuestiones de poder. Ningún política dice una palabra sin la búsqueda de beneficios personales. el bien común jamás ha vuelto a ser motivo de acción en la practica. Nuestra ignorancia como parte del pueblo nos supera.

Que gobiernen los mentalmente privilegiados, o los muy culto por los caminos de la vida, o los elegidos entre solo los validos. No podemos poner el poder en manos de cualquiera persona el poder político. Debemos de poner unas condiciones formales tanto para votar como gobernar….por favor olvídense de que todos el mundo puede hacer de todo...somos afortunadamente diferentes.

Y seguro que estos teoréticos, salvadores e iluminados que dominaran al pueblo por sus grandes e inmensas imposibilidades aun sabiendas de la imposibilidad de sus promesas, acusarán a estos intentos de selección por capacidades serán calificadas como un acto...franquista, Nacista, Fascista u Comunista, extremista, Radical y otras herramientas propias y repetitivas de los podologos actuales.

La política murió La discusión en la búsqueda de la solución ya es un sinsentido. No hay intención de construcción resolutiva. Lo único que nos encontramos es disputas, enfrentamientos, intereses, estancamiento política. La raíz de la política ha muerto y su nombre se ha perdido. Tiene posibilidades de convertirse en un programa concurso sobre el control del lenguaje, posturas y formas. Un programa de diversión.

La política, realizada por hombres y mujeres, por personas, que su intención filántropa y desinteresada lleven el bien a todo un determinado pueblo estos ya es un sueño. Y la realidad nos niega su futuro. Aunque insertos en los diferentes pueblos o ciudades, los dirigentes actuaban para los ciudadanos, dos estructuras estatales, Atenas y Esparta. Ahora ya no. El individuo, el ciudadanos ha desaparecido.

Cualquier, otra organización estatal estará siempre despreciada y acusada al ser entendida de un moda impositivo y selectivo.

En la antigüedad ya la existieron otras organizaciones, elegidas y funcionales

Con existencia teórica y real.

El ser humano estamos ahogados en la mentira de la igual.

Mismo derechos y deberes, pero no tenemos las mismas capacidades ni posibilidades.