lunes, 29 de agosto de 2016

ESTETICANTROPOLOGÍA



Y pienso en el arte, y no hago Estética, sino, Esteticantropología.
Recogiendo y plegando la ropa de la maleta recién  llegados del viaje, enciendo el aparato y “pronto”, oigo la “Cello suite No. 1 – Prelude”, Bach. Grande, muy grande. Tras esto me lanzo a la cocina  poniéndola en en condiciones.  “Gangsta’ Paradise. Coolio feat. L. V”. Con este ritmo brutal no se me ha escapado ni un solo plato de su lugar. Y tras acabado todo este quehacer que con la música fue divertido, abro la ventana, me rulo un cigarrito, y mientras escucho “La noche es casi perfecta. De Eros Ramazoti”, y me satisfago en la propia música.
Estos son los datos, el empirismo, la realidad,  lo que ocurre y pasa y la siguiente pregunta es, y entonces, ¿Cómo tratamos de acoplar en una misma figura tan diferentes situaciones, ritmos, voces, sensaciones?
¿Por qué y cómo me hablan del mismo fenómeno dentro del mismo concepto a, y sólo digamos, Bach y Coolio?
Mirad, único que tienen en común es la vía de trasporte. Nada más, absolutamente nada más.
Y tras esto ¿en qué consistirá el examen Estético del arte?
No más que una parte de la Antropología, como una parte integrante de la esencia psicológica del ser humano.
El estudio más coherente y útil, seria estudiar las emociones que producen, asociar esas emociones con las características del sonido producido, y tras esto definirnos como personas.
A ver, y escucho a Bach y siento delicadeza dentro de una grandia, y digamos desde mi máxima ignorancia en música e inventado sin pudor, que son las vibraciones agudas dentro de unos determinados ritmos  las que directamente producen este efecto mental y psicológico.
Y con Coolio, cuando me quiero dar cuenta, ya me andaba pendulando, y alcanzando la conciencia de ello cuando ya se producía Estudiemos, entonces, los ritmos, el tiempo producido entre los intervalos, el golpe sonoro, instrumentos, sonido, duración, y estableceremos en qué momento se puede establecer estos movimientos involuntarios en el sujeto tras escuchar unos ritmos en unas determinadas situaciones.
La música, que moriría sin  ella, además de considerarla como un hecho externo, Estético, cuyo estudio será el objeto en sí, también, y como objeto existente tiene una validez en el estudio científico, es decir, Antropológico en el ser humano.
Sería la Esteticantropología.
Si queremos tratar y encasillar a la los diferentes sonidos en el saco único llamado  música, por lo menos que sepamos que es un acto erróneo pero necesario.  
¿Existencialismo, Vitalismo?, ¿me enajeno y me observo, me abstraigo y me contemplo, me imagino rulándome el cigarrillo y me estudio?, ¿concluyo observando el espectáculo?, no sé, no sé.


sábado, 27 de agosto de 2016

...de cuando Internet me llevó a la deformación...




Como todo elemento evolutivo, pese a lo que nos parezca, será un proceso paulatino y cándido. Llegará el punto en que actuaremos ante la normalidad de la indirecta y artificial vida  de la total conexión por internet. La relación cambiará.
Será un hecho evolutivo social, consecuencia de aquel camino que cogimos al decidir enfrentarnos en grupo a los problemas diarios y habituales.
Y la dinámica de relación, con normalidad y proceso evolutivo, siempre hacia a delante y dentro de las coordenadas por nosotros buscadas, formaran y configurarán nuestro hecho vital, social y personal.
Cualquiera de vosotros permanece en el misterio y en el  mundo de mi imaginación.
Cualquier juicio que hiciera sobre vosotros estará condenado al error.
Nos hablan de amor, y nunca sabremos, sin ver las lagrimas en sus ojos, si lo hubiera amargamente perdido e hiciese, entonces unas reflexiones profundas sobre éste, cuando nosotros pensábamos  que era, en este caso, una persona que sueña y vive por amor.
Es un hecho evidente que cuando la evolución de ideas no se realiza mediante un cara a cara y una relación directa, los engaños y errores sean, al menos, más difíciles de disimular, el resultado va a ser distinto.
Seremos más humanos en el sentido de nuestra evolución propia por nosotros elegida y construida, pero, aun que me pese y  me duela,  nos alejamos, no de nuestra esencia buscada sino del concepto propio y particular de la felicidad.
La intelectualidad, la cultura, la comunicación, pueden  existir sin ser invasivas de nuestra intimidad como seres humanos
El fin o el motivo evolutivo, se pierde en la inexistencia de objetivo hacia el cual nos movemos. Son elementos de tercera importancia lo que marca nuestro camino y andar como seres humanos, no hay ningún elemento inmutable y fijo que nos marque un objetivo.
La evolución social se perdió en el carretera, aunque siga avanzando hacia allá donde nunca estuvo y desconoce, con totalidad, como es.
Internet será un elemento constitutivo y formador de nuestro comportamiento social.
La mascara de las pantallas, formarán parte y serán elementos esencial de nuestra situación, a todos los niveles.
Con el paso del tiempo esto llegará con total amplitud e invasión.
Dejaremos de compartir el sudor de las conversaciones emotivas, olvidaremos la calidez de la poesía narrativa en la boca de aquella persona.
Lo único en estado de off, es nuestra evolución biológica, pues, afortunadamente, no hay ninguna característica física que de como consecuencia una mayor reproducción. No sé cuando perdió validez Darwin en el ser humano, pero ahora ya no es parte de el.
La evolución social o individual, ya no es un acto de selección, sino de pura y dura elección.
Seguiremos avanzando en busca de objetivos que poco o nada tendrán como objetivo el ser humano. El fin serán los objetos que nos rodean. Seremos más, sólo aparentemente más felices, cuanto mayor velocidad, del coche, del avión o de Internet.
La falta de contacto y la lejanía será el futuro de las personas.
Sin forma revolucionaria, nuestro futuro nos alienará y trasformará del nuestra constitución, formas y maneras actuales.
Estamos en manos de la tecnología y el mercado, dos elementos que ya funcionan, pasean y avanzan sin ningún hecho decisivo de aquellos que  creíamos dueños de la realidad, cuando es mentira, desde que los objetos creados se nos han impuesto y configurado.
Las ideas, las expresiones, las emociones se apuntalan en mis pensamientos, las palabras invaden y se instalan con la ansiedad de ser escritas en mis dedos, mis repasos son engañados por mis ansias de compartir el escrito.
Estoy escribiendo en Internet. Juez y reo.
Quiero pensar que el modo y manera de mi utilización, escapan de mi crítica. Eso quiero pensar.
El orden en el escrito, le quité quizás la belleza de la fuerza de la improvisación.
Ahí va, ¿el qué?, lo que hay, sólo y nada más.



domingo, 21 de agosto de 2016

LA ESTÉTICA DESVIRTUADA



Entiendo por ella, cómo la imagen que nos formamos de los objetos a nivel mental, y adquirida a través de cualquiera de nuestros sentidos.
La estética, en ciertos momentos, es vida, es confort, es suavidad en mis sentidos frente a ella.
Pero, en su concepto actual se desvirtúa y se engaña, pues la trasladamos del sujeto que la vive al sujeto que la pretende.
En el David de Miguel Angel, yo no siento la grandeza en el autor, sino la belleza del objeto y cuando veo La tentación de San Antonio, no veo su irrealidad en los bigotes de Dalí. Son dos grandes artistas y su estética se disparaba hacia los objetos circundantes.
En la actualidad la estética es un autentico fusil con el cual los personajes públicos, de muchos sectores, la utilicen como arma de fortalecimiento propio. La estética llega a un punto y uso, en el cual no merece estar.
Si que la entiendo como un acto de belleza puro, la que se exhibe en los grandes eventos de alta costura, pero me parece una utilización equívoca y contraproducente, cuando estos mismos modelos son utilizados como arma personal, en los propios interés de aquella persona que los luzca.
Falsean la estética, la dan un valor y un uso que la desvirtúa.
Al estar sujeta al individuo, puede estar predeterminada con sentimientos como envidia, desvinculación, desprecio hacia la persona, y otros que falsifican y destrozan todo el valor primero.
Aun que durante toda la historia de la humanidad ha sido utilizada como un elemento más, en cualquier movimiento ideático, en la actualidad es más peligroso pues está camuflada en lo que parece una normalidad absolutamente aséptica, inocua y de puro divertimento.
La magnifica chaqueta azul con ajustados pantalones rojos formando un bonito, muy moderno, algo retro, muy “in”,  conjunto del caballero, pero que no da ni un ápice de valor total a la persona que lo lleva y la chaquetilla de la mujer con unos ajustados pantalones rojos, está exactamente en los mismo campos.
La estética de la convivencia intima, cercana o primera, no tiene nada que ver con la utilización a ámbito interesado social. Pero por aquí, no avanza.
Si la estética es un arma en forma de signo, perderá, antes o después, su valor primero adquirido.


viernes, 19 de agosto de 2016

El cáncer de la tecnología



-         - Es el camino a seguir, es el porvenir y diferencia. La tecnología forma ya una esencia formativa en nuestra vida. Es buena y necesaria.
Eso le decía un contertulio a otro en la brillante barra de aquel café en medio de Valencia.
-         - ¿Por qué me dices eso?, ¿porqué te has criado en ella?, ¿has tenido elección, has vivido en otras circunstancias?
-         - No, pero es un echo obvio y evidente que así es.
-          -Y es con esta evidencia por ti nombrada,  cuando entramos en el error que llevamos tantos siglos arrastrando.
Esta ultima opinión la dio Andrés. Era un hombre mayor, bien colocado y muy resabido. Quedó soltero pronto por el fallecimiento de su mujer a los 60 años. Superó bien la tristeza y en vez de convertirse en un alma en pena, pasó a ser un dulce transeúnte de la vida y que, de vez en cuando, paraba a charlas en los barres y cafés. El otro, Pedro, era bastante más joven que él y tenía todas las virtudes de ser una buena  inteligencia  con inquietudes y todos los defectos de la situabilidad e ingenuidad juvenil.
-         - ¿Es decir, me afirmas que los nuevos trenes que te acercan a Madrid, por ejemplo, en una hora y media, no es preferible que ir en caballo y tardar dos días?
-         - Eso dependerá directamente del ritmo que impongas y quieras llevar.
Se quedaron  mirándose. Pedro ya tenía experiencia en su conversaciones con Andrés, que se fuera por la tangente y atacara el tema de discusión por otras vertientes, al menos, poco esperadas. Ahora, aquí empezaba a rumiar otras hierbas.
-         - Andrés, el hombre crea la tecnología a su servicio y le impone y utiliza para su antojo.
-         - No, mi joven amigo. Es ella la que nos somete a sus ritmos y posibilidades. A acelerado la vida, está deformando la evolución total de la especie.
Máxima afirmación, tremendo principio de discusión. La cara de Andrés se tornó en una esplendida mirada de complicidad mientras la de Pedro, a la par que levemente se alejaba, suscitó impresión.
-         - ¿Mala para la humanidad?
-         - Sin muchos cambios, sí.
Continuaron mirándose. Pedro seguía algo impresionado ante el calibre de la afirmación de Andrés y éste, estaba satisfecho de encontrar alguien que quisiese escuchar la verdad.
-         - A ver, amigo – cambió el tono .- cuéntame, dame ejemplos, justifica tu opinión, por favor.
-         - Todo, absolutamente todas las operaciones mundiales ahora realizadas, se podrían igual realizar, bajo los mismos, fines, objetivos y correcciones que en la actualidad, si bajamos a la mitad el ritmo de la vida. Si todo movimientos, todos, le das una holgura de alguna hora más, la estructura no tendría por que romperse, pero si que aumentaría la calidad humana. La máxima velocidad en los medios de comunicación es el objetivo primero. Parece ser una elección pero ¡es  una trampa de la tecnología!
-         - Vale, bajar totalmente el ritmo de operar y trabajar. Tratar de vencer los movimientos usuales, huyendo de la máxima velocidad que nos impone la tecnología. Vale, pero ¿Qué me dices de internet y la globalización?, estamos, el ser humano, desarrollándonos como tales al compartir, por todo el mundo, la comunicación y convertirnos en una unidad.
-         - Sí, una unidad solitaria y repetitiva.
De nuevo Pedro, bajó la cabeza mientras se acariciaba el cuello permaneciendo algo acurrucado. Andrés, más  erguido le ofrecía una mirada de divertida piedad.
-         - Contertulios, a ver, que ya son muchas ocasiones para no pedirles que levantes sus vasos y sus codos de la barra, que voy a limpiarla – les dijo el barman, despertando a Pedro del sueño de las dudas.
Le miraron con una sonrisa, mientras intercambiaban un par de frases divertidas.
-         - Sí, Pedro, las pequeñas culturas se difuminan entre la colectivación, los usos y costumbres más numerosos que se hacen extensivos y dominantes en la totalidad. Tres o cuatro películas de aquel país que tú y yo sabemos, hacen que en un pequeño pueblo Africano, en el cual los abuelos del niño, que ya sueña no más que con sus vaqueros, tratasen de explicarle la unión de su espíritu con la naturaleza, como mudus vivanti de su cultura y pueblo durante miles de años. En los nietos de este abuelo, su cultura morirá y este la verá fallecer.
-         - Entonces, la tecnología humana sin limites está mal utilizada y pues, ¿Cuáles son esos limites? – pregunto, mientras sonreía pensando que ésta era la suya.
-         - En la medicina y la educación. Todo lo demás, animales y piedra.
Las risas se oyeron en todo el bar. Eran los dos los que reían. Llegado a un punto de la discusión se reían de las posibles barbaridades o errores que cualquiera de los dos hubiera o pudiera haber cometido.
-         - Qué bueno es compartir mis sueños y esperanzas, Pedro.
-         - Y más bueno es hablar con aquel que, desde la perspectiva de publico en la corrida de toros, opina, ve y sabe.
Pedro se levantó, tenía una importante cita. Se estuvieron riendo otro rato más bromeando sobre ella.

Se fue. Pedro se pidió otro poliol y se giró hasta verse face to fece con él mismo en el espejo de la barra del bar, pensando en las consecuencia de su fuerte, cierta y consecuente convicción del cáncer de la tecnología.

viernes, 12 de agosto de 2016

En el café y tanatorio de la Filosofía



-         La Filosofía, como razonamiento abstracto, debe de ser asesinada, pues sino nunca morirá.
Los ojos, de Pedro, cual platos anchos de ensaladas, abiertos se encontraban. El ancho de la barra, apenas llegaba al diámetro del circulo de su pupila.
-         Me parece que no oigo bien, Andrés, o he perdido el juicio o he encontrado la locura. ¿Qué me dices, amigo?, hemos cabalgado juntos, entre los conceptos e ideas, buscando fines y mares donde atracar nuestras dudas, y ahora ¿te vas y dejas los azulejos amontonados  en el camino?
-         Sí, la ciencia y el empirismo, por fin, me ha sacado del mareo de la constante duda. Estudiaré, observaré, razonaré, no sobre el mundo, sino sobre las personas. Sumaré y restaré acciones, pensamientos, datos y con ellos trataré de concluir. Será un esfuerzo teórico grande tratando de establecer el cuadro de relaciones entre entidades concretas  a observar y tras esto, concluir con ellas. No quiero encontrarle un significado al cosmos, quiero saber bajo cuales circunstancias y en que momentos, el ser humano, encuentra un sentido o se queda sin éste, en su vida. Y no es Psicología pues no contemplo ninguna patología ni explicación del dinamismo propio. Es el sentido encontrado en las consecuencias de sus actos. Actos, que por natura, son más afines a las personas. Ciencia, ciencia.
-         No Andrés, no, no harás ciencia, dejarás de hacer Filosofía.
La mirada de Andrés a Pedro, apenas duró unos segundos, pero para los dos se hizo larga. Ninguno de los dos dudaba de sus pensamientos, pero el problema estribaba en que tampoco solían dudar de las palabras de su amigo. Entre la firmeza de carácter,  personalidad más la diferencia intelectual  momentánea, produjo un enfrentamiento en silencia grande, fuerte, bonito.
-         ¿Filosofía me dices?
-         Sí, Andrés. La filosofía, cuando fue parida y llegó a la vida, nunca trató jamás ninguna intención de utilidad. Era solo un canto a la sabiduría de aquellos que podían seguir el camino de ella.
-         No, Pedro, es un error en el cual nos han educado. Sí que querían y buscaban una aplicación directa, rápida y segura de sus pensamientos. Estudiaron, aquellos primeros, al ser humano y su sociedad. Querían más que el placer del pensamiento. Avanzaron y fueron fundamentales porque nos enseñaron a pensar. Pero aquí se acaba su validez. Debemos de aplicar y buscar los mismos cuestiones y dudas pero se acabó de volar entre las nubes de los conceptos y tratemos de encontrar datos descriptivos y significativos del alma humana.
Al pronunciar la palabra del alma humana, Pedro se sintió afirmado,  pensando cual sería la prueba empírica de esta misma.
-         Y crees Andrés ¿Qué podrás llegar al conocimiento del alma a través de un estudio empírico?. Sorpréndeme.
-         Vale. Introducimos al sujeto en un medidor eléctrico craneoencefálico, le inducimos , al sujeto, ciertos pensamientos y observamos la zona del cerebro que mantiene máxima actividad. Filosofía ¡mucha!, ¿Qué temática nos máxiexcita?, ¿es un efecto reversible, es decir, la misma actividad eléctrica producirá los mismos efectos emocionales?, es decir, ¿tenemos una dependencia y relación directa de nuestro estado anímico, con nuestra formación material?, ¿es esta actividad emocional lo que llamamos nuestra alma?, o no hay ningún cambio apreciable, ninguna actividad eléctrica captable, pero tenemos el estado anímico muy variable ¿será que el alma vuela entre nuestra mente y nos engaña haciendo parecer material?, se puede llegar muy lejos Pedro.
-         Andrés, tus creencias sobre la capacidad de saber o de encontrar las soluciones es peligrosa. Buscas más de lo que se puede y esto  te llevará a la decepción.

Pep, los miraba desde el otro lado de la barra mientras estaba apoyado en la parte baja del cristal. Normalmente trabajaba como uno más, aún siendo el dueño del bar, pero en aquel día no. La faltaban fuerza pues la conversación le había apretado como el corsé que se ponía su madree en los días de misa. Si nuestra alma, el saber, la teoría, las  máquinas. Impresionante. Se estaba acabando una cerveza,   tranquilidad como nunca ante una especial conversación entre los que siempre tenían algo bueno sobre lo que hablar. Pedro se giró y se quedaron  mirándole.
-         Y tú, David, dinos.
Sonrieron, con sinceridad los tres, pero David, con discreción, no pudo evitar carcajearse.
-         ¿Qué hable con vosotros en esta temática?, no amigos no, estoy enamorado de vuestras conversaciones pues no escucho las tonterías que habrían si estuviese yo entre vosotros, pero ahora y en voz baja os digo que pienso que el alma o el espíritu humano sí que puede ser demostrada como  tal. Haciendo un estudio y una posible relación o imposibilidad de nuestra entidad material con una entidad supresensible, sería un buen camino con muchas conclusiones útiles.
Pero y Andrés lo miraban con una  gran sonrisa.
Variaron el radio del circulo  e hicieron más íntima la conversación. El alma, la poesía, las conexiones eléctricas, el amor, las neuronas, la paz, el aprendizaje y otros difíciles conceptos, situaciones e ideas se nombraban y desarrollaban con frecuencia.
Ya se iban, cuando Andrés se adelantó, separándose del los dos y levantando sus manos, se dirigió a todo el bar.
-         Y Ustedes ¿piensan que es mi alma,  mi espirito el que me lleva a levantarme y decirles que conversen si quieren llegar a algo o es una pura y dura conexión nerviosa que en vistas a operaciones anteriores dejó el camino del uso correcto ya marcado?, piénsenlo y contéstenme.
Pedro y David sonreían con sinceridad y divertimento.
Los demás clientes permanecían absortos pues poco comprendieron. Pero en algunas palabras hay mensajes que por muy lejos que te encuentres los encuentras.
Andrés salió del bar y sacó la cometa del alma y se dedico a saltar entre la olas materiales que se encontraban ya en la puerta del mar.  

lunes, 8 de agosto de 2016

...de la imaginación que se fue atrofiando y nuestra creatividad se quedó coja...

Aquello, es un aspecto esencial, constitutivo y formador. La dependencia total en cuanto a nuestra comprensión y proyección de mundo. Vivimos siempre en aventuras ya constituidas y organizadas por los otros. No hago más que flotar en aquel mar que ellos me dibujaron. No realizamos ningún acto innovador, siquiera, en nuestras propias vidas. Cuenta con otros factores no individuales
El mundo digital es un ejemplo ilustrativo, sólo ilustrativo del problema, pues éste va más allá.
Los niños ya no imaginan al jugar con los pc, movibles o Tablets, en los cuales ya está todo constituido y hecho. El niño, adulto a quien sea, ya no imagina. Juega en la imaginación, interesada y impura, de otros. Es un hecho ilustrativo,  pero es extensible a toda una sociedad en la cual el exterior  la persona está casi totalmente constituido. Los mass media dibujan un mundo y nosotros, los individuos nos movemos en éste.
La diferencia es el derecho a la libertad de crear. Pero ésta está  realmente atrapada en los corsés impuestos por intereses, también ciegos por el propio bucle formativo.
Y le dije que dejase la máquina y sus quejas, de los tres, de haber que hacemos, me hizo ver con claridad, como esas realidades virtuales estaban atrofiando la capacidad creativa de los niños. La ausencia de las maquinas recreativas, las obligó, tras aburrirse un rato, a inventarse un juego y a divertirse. Si no apago la máquina, el ejercicio de relación con objetos exteriores, no se hubieran visto sometidos a un acto de construcción, relación y composición de elemento para crear una escena imaginaria en donde desarrollar el juego. No, en las maquinitas no construyes, no relacionas, no trabaja de la imaginación ni el cerebro. Sólo tus terminaciones nerviosas y tu inquietud.
Esto es claramente y realizando un paralelismo extensible al ser humano, nos encontramos con que nuestra capacidad de asociar ideas, elementos y sacar conclusiones, está claramente infravalorado pues los actos, elementos, acciones que nos rodean, ya están juzgados, estudiados y ubicados en la posición concreta. Masticamos un pastel ya cocinado.
Es la falta de libertad, voluntaria, no impuesta, por estas sometidos a unas fuerzas fácticas de acción ante la que o nos rendimos o no somos cuenta de su dominio.
Las personas nos vemos sometidas a un mundo ya constituido.
Los niños de 12 años sueñan con monstruos y princesas tal y como aquel persona de 50 años imaginó. No los dibuja, no los crea, los imita, con vida y en movimiento.
Cierto es que estos problemas en cuanto a calidad, no son  nuevos. Digamos que la televisión siempre nos hace huir de nuestra realidad y nos deja soñar en la imaginación de otros,  pero actualmente ya no es un hecho lúdico, de divertimento, es un hecho patológico y enfermizo que domina  y controla la mente, proyectos e intenciones del sujeto.