Perdidos en nuestra primera naturaleza animal, nos apretamos en las grande ciudades.
La mediocridad es seguida, ensalzada, adorada.
Cualquier acción que necesite un pequeño esfuerzo mental es claramente despreciada y abandonada.
Perdemos nuestra capacidad de elegir, decidir y nos dejamos arrastrar por las fáciles vanalidades placenteras....momentaneas y directas.
El poder por egocentrismo y el placer corporal son los únicos movimientos vitales imperantes en la actualidad.
Es el Carpe diem, siempre mal utilizado. De la reflexión sobre el presente, pasado y futuro y su carga, presencia y exitencia pasa a significar el disfrute momentaneo vacio de significado.
Quiero huir de esta realidad...pero...¿ a donde ir?,¿donde encontrar gente con inquietudes y dudas vitales?...¿ quien se pregunta sobre nuestra esencia y existencia?
No existe, no se da en la actualidad.
Y, atención, si alguno o alguna, siente en ti estas inquietudes, pasarás a ser un gran perro verde y te mirarán como tal.
Tengo hijos y soy profesor y tengo la oportunidad de trasmitir estos pensamientos, pero me siento solo, muy solo en el intento.
Caer en el fango de la vulgaridad,es fácil y está bien visto, pero elevarte al cielo del pensamiento es difícil y serás obviado.
Estas lineas, estas reflexiones...buenas o malas, buscar similares y os sobrarán dedos en las manos para contarlas.