Ahora, ayer y hoy, sólo escuchando a Vivaldi o albinioni consigo desconectar. Mis neuronas juegan demasiado con mi corazón.
Cada dia pienso mas en mi error al aumentar a capazos a diario mi distanciamiento, incomprensión y disconformidad.
Pero cansado estoy que me escondan la realidad bajo una sonrisa.
Aburrido estoy de escuchar lo que al día de hoy nos entretiene y ocupa.
Imagino y considero que en el caso de tener una mejor situación circunstancial a nivel material, mi cosmovisión sería diferente. Pero en esta soy positivo y me agarro a la creencia que este estado me libra y me libera de las ataduras impuestas por la ansiedad ante los bienes materiales.
El dinero es importante pero contingente.
Tu equilibrio mental, tu realización personal, la imposición de tu ser a las circunstancias son elementos necesarios y directos en tu construcción y felicidad.
Sin dinero si que se puede ser feliz, pero si no estás bien contigo mismo, ni todo el dinero del mundo te la dará.
Éste es el diario y comentarios de un pobre de bolsillo pero rico en el corazón.
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