Las Dudas y mi Verdad.
Las dudas son las alas de mis pensamientos que acaban siendo
cemento atado a mis pies mientras me lanzo a la mar.
La finitud de nuestra comprensión nos ahoga tratando de
llegar a la paz en ella.
Sólo encontramos nuestra plenitud en nuestros impulsos e
intuiciones, pues ya no te equivocas ya que eres tú quien actúa y no tus pensamientos
atados al error.
Tu decisión no que te lleva al error, pues no es tuyo, es la
naturaleza quien tuvo una construcción equivoca.
No quiero ahogarme entre las dudas del mundo que me rodea,
la sumisión a las reglas y a los juece, me hace fallecer.
Dudas, que ya me esperaban antes de nacer.
No puedo huir de ella. La única solución sería la destrucción
del mundo y quedarme en la soledad del silencio.
El mundo es artificial, sintético, construido, donde la
solución de las dudas está en los principios de la empresa constructora, te resulte
resolutivo o no.
Hasta que no logre ensalzarme como poseedor de mi verdad, el
martillo de las mentiras rompe mi cabeza.
Cuantas más convicciones mías dominen mis actos, quizás
llegue a ser libre.
Cuando consiga patear a las hienas sucias, de grandes
dientes sarnosos, entonces comenzará el escándalo y mi huida.
Huye de las personas mentirosas que hacen publica cualquier
verdad, y que actúan por encima de las dudas.
Esto no es la verdad, éste es el camino que yo elijo.
Si crees que tienes la verdad, mejor te callas.
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