lunes, 9 de diciembre de 2013

INMANUEL KANT




Y me lo preguntaban y yo no sabía que contestar, hasta que decidí concretarlo.
No he encontrado a ninguno que sobresalga por los demás, pues cada uno aporta su parte propia e insustituible en la cuenta de la verdad, pero sí que digamos, hay algunos con mas hechos destacados. Ahora bien, un cajón con los mejores, pero aquí, ninguno mejor o peor entre estos.
Y uno de ellos y tras la impresión que tuve de ello es Inmanel Kant, que estudiándolo allá por su varia no recuerdo vez, decidí colocar sus pensamientos en la vanguardia y configuración máxima de nuestro pensamiento, esteriotipicación, validez y construcción personal y social de nuestras personas.
Va a realizar dos visiones universales y necesarias que nos van a llevar a una verdad de carácter universal así aceptada y no discutida por nadie.
Dos puntos que forman la valla de los premios, el primero es la construcción del mundo por nuestras personas después que la información que nosotros tenemos a pasado por nuestros filtros de conocimiento y dos,una terrible y tremenda Ética formal que ridiculiza muchísimas acciones propuestas bajo el mismo nombre.
Aún con sus necesarios y conductores antecedentes aquí y en todos los pensadores, kant, fue el primero que especifico el asunto de la construcción en el movimiento de asimilación de la información y el proceso del hecho. Es el por todos ya conocido giro copernicano y que siento que en muchas ocasiones lo utilizamos sin darle la absoluta importancia y la actualización del punto de inflexión en el pensamiento humano cuando se dejó de mirar al mundo como una figura inmóvil y cerrada que nosotros observábamos desde fuera, y se asumió que el ser humano constituía un elemento formativo, esencial y formador de la realidad con la que trabajamos.
Hasta él, este principio formativo de la realidad era inconcebible pues no se ajustaba a ninguna concepción cosmológica.
Aquí por un lado y ahora el segundo punto. Jamás hasta ese momento hubo nadie que realizó unas normas de comportamiento sin aludir a cualquier entidad suprahumana, antromorfizada, espiritual o ideal. Fue la Ética formal. Unos puntos básicos de comportamiento que implicaban una corrección de la acción en si. Estos principios, tales como el ser humano como fin en si mismo y nunca como medio, son perfectamente asumibles por toda y ninguna de los movimientos religiosos, espirituales o modales que pueden y nos podemos encontrar.
Es una ética sin enemigos posibles pues tiene cabida, desde ella en solitario a entre cualquier tipo de orden moral.
Fue un pensador completísimo al tratar desde la epistemología, la ontología, la ética o la teología de una manera racional pero con visión práctica y arras de tierra.
Es grande aquel que oculto bajo los botones de su traje negro impuso a las personas una verdad enorme sobre nuestra verdad constitutiva y nos hizo ver que nuestro mundo no es sino una recreación y construcción de nuestros sentidos procesados por nuestra mente y nos hizo saber que no hacia falta apoyar nuestra actividad social y colectiva en divinidades que sobre pasaran nuestra acción como agentes sociales con un uso optimo de la racionalidad.

Cuanta claridad mental

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