sábado, 22 de marzo de 2014

RELACIONES ECONÓMICAS





Y me pongo a viajar por entre las páginas web y encuentro información de Internet y salgo de ella, en demasiadas ocasiones, espeluznado, normalmente por fotografías y comunicaciones que en ella encuentro.
Ésta nueva concepción de la totalidad viene marcada por la acumulación de datos y por ello me pregunto si este aspecto es, fue o será determinante para el contenido de las conclusiones.
¿Quizás Platón y Aristóteles organizaron y concretaron sus sistema político sólo en función de la Antropología que dominaban y, entonces, pierde todo sentido fuera de ella?
¿Quizás el Budismo y su organización anímica y social sólo tiene cobertura en una determinada cultura con unos margenes claros de datos e información?
¿Fue Montesquieu un reflejo, sólo y únicamente, de la situación social y circunstancial de la Europa del siglo XVIII?
¿Los principios formadores de la carta magna de los Estados unidos de América propuestos por James Madison, sólo tienen sentido dentro de la búsqueda de su arreglo económico?
Sí, he puesto ejemplos realmente fáciles, sencillos y con una validez pequeña, pero que pienso y opino que ilustran la problemática, que será, ¿hasta que punto sacamos conclusiones o organizamos correctamente las estructuras sociales?, ¿somos capaces de crear instituciones y valores que superen las circunstancias y que no deban estar constantemente sometidas a ellas?
Pues no, siempre las circunstanciamos y siempre buscamos un beneficio material y no espiritual o anímico de los individuos formadores de susodicho grupo.
Cada vez veo y entiendo las discusiones más repetitivas y aburridas.
Deberían hablar en plata.
Deberían hablar de dinero que es el único elemento que actúa como juez corrector en estas divergencias, aparentemente sociales, culturales o políticas que trasgiversan el mundo.
Si no hubieran intereses económicos, las problemáticas territoriales y culturales se acabarían automáticamente.
Los genocidios y movimientos homofonos no son más que producto de un enriquecimiento por alguna de las partes.
Los movimientos esclavistas Europeos del siglo XIX, no venían dados, en ningún momento, por la concepción de inferioridad de razas. Se vendían entre ellos tras las guerras propias tribales, y estos eran llevados a trabajar. No se les consideraba inferiores cuando comenzó el proceso.
La persecución sobre los Judíos realizada en Europa en diferentes épocas, sólo ha venido dada por el control monetario o el alto nivel económico que estos sustentaban.
Hablemos de relaciones y situaciones económicas.
Tengamos una mayor tolerancia hacia la diferencia pues el el único valor real e identificativo que alberga la especie humana.
El respeto hacia ella es necesario pues es una característica formadora de lo que somos.
Si juzgamos desde la totalidad estamos, estamos perdidos.
Si observamos, desde la diferencia, el asunto y relación funcionará.
Si se habla con claridad y se deja las proximidades ideológicas o racistas y se habla de los intereses económicos, se dejará a un lado conclusiones de las actuaciones que son realmente peligrosas.
En conflictos internacionales estoy cansado de oír matices y elementos y motivos falsos.
Es el dinero y no más, lo que mueve las disputas.
Guerras, terrorismo, ¿religión, cultura?, no, no, tengo cerca problemas territoriales que sólo quieren mas dinero que se piensan que se merecen. No mas.
Es triste hablar de elemento conductor de relaciones como el dinero, pero peor es tratar a la gente como inferior o superior según raza o situación.


 Apliquemos motivos extensivos atoda situación social.

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