LA
COMUNICACIÓN
Cap
I
El
desfase temporal, era tal, que jamás, pero nunca jamás, podrían
tener un contacto físico directo, así pues, era un total y completo
intercambio cultural, de conocimientos científico, filosófico y de
ubicación.
Les
dijeron que sí, que las habían más allá de donde ellos podían
llegar que quizás, en un futuro puedan también ponerse en contacto
con ellas.
Trascurría
el año 2056 cuando se tuvieron las primeras comunicaciones claras y
directas.
No
hubo, en el proceso, ninguna duda primera y normal, sobre de donde
venia las señales.
No
se sabían sus significado ni su traducción, pero los ritmos de
emisión, eran claramente ordenados en la variedad.
El
lugar de origen era, en su correspondiente zona del mapa estelar, la,
entonces llamada, Galaxia UB3457, Estrella UC5464 y Planeta UC46711,
situada a 24 años luz de la tierra.
Éste
era el desfase de la comunicación y la imposibilidad del contacto
directo.
Sabían
que allí estaban pero jamás tendrán una interacción práctica la
una sobre la otra.
Comprenderse
y estudiarse desde la imposibilidad del contacto.
La
concepción de la realidad cambió.
Se
tardó cuatro años en darse cuenta, buscando relaciones algorítmicas
entre las posibilidades, que la solución estaba lejos de allí y
consistía en el código de Morse utilizado en las primeras
comunicaciones electromagnéticas, con todo su desorden producido por
los fallos ocurridos, en su dificultad tecnológica, de aquellas
primeras trasmisiones, teniendo todos y los mismo errores que se
hicieron, lo que complicó aquel descubrimiento.
Para
que aquella primera comunicación pudiera tener lugar, debieron de
captar la información del Morse sobre los 60 años atrás.
La
distancia temporal insuperable el umbral de los años necesarios para
ella, producía que la reproducción, el medio de comunicación fuera
siempre pasado, antiguo. Siempre será desfasada, ningún tipo de
información puede llegar a la velocidad de la luz y las velocidades
mas aproximadas a ella, es decir que hacen posible la comunicación
producida una temporalidad mínima de 57 años entre los unos y los
otros.
Trabajaban
sobre sus pasados.
Así
y entonces comenzaron a leer, interpretando un corto mensaje de Morse
en el observatorio.
Permanecía
a media luz sentado, sujetándose la cabeza con una mano, y girando
ésta hacia el folio que sujetaba con la mano izquierda. La releía
una y otra vez. Andrés estaba realmente confundido, no por la
corrección en la trasmisión del lenguaje, sino por su contenido. Se
mareaba cuando era consciente lo que aquello significaba. Tenía cena
en casa de sus padres. Hacían sus 23 años de su aniversario de
bodas, los mismos años que cumplía Andrés, apenas ocho meses
después – efectivo hijo, efectivo, le decía haciendo una broma
sobre la proximidad de las fechas. Estaba pasando el año 2060,
cuatro meses de las primeras señales y no hacían mas de dos días
que habían comenzado a traducir al Morse. No sabía si podría estar
tranquilo en la cena. Máximo secreto y silencio. Nadie, nadie y
nadie debía de saber esta ultima información que el equipo de
investigación ubicado en Tenerife había concretado, hasta el
momento indicado por las autoridades para hacerla pública. En el
mismo momento que Andrés levantaba la cabeza, entre su perplejidad,
entró Cipriano. Los dos se quedaron mirando fijamente.
-
He trasmitido toda la información a todas las entidades científicas,
matemáticas, y demás observatorios ligados en la investigación y
seguimiento y sí, todos, toditos la traducen igual que nosotros.
Tras
Cipriano, entró Carmen, directora del observatorio.
-
Compañeros, leamos, traduzcamos y presentemos esta noticia a nivel
mundial. Vamos a prepararlo bien y mañana por la tarde, a las 9 del
meridiano Greenwich,. Saldré en directo, así que vayamos a ver.
Andrés leémelo otra vez......
Cap 2
Era
una sucesión de palabras acabadas y definidas, formadas con los
diferentes ritmos propios del lenguaje Morse. El mensaje no tenia
sentido alguno, pero las estructuras venían claramente relacionadas.
La intencionalidad es sólo de la vida inteligente, y la es, según
el mensaje, y ésta era por este, tanto o al menos como la nuestra,
con la capacidad de captar, de interpretar y tratar la comunicación.
Andrés
sabia que aun dando todo tipo de datos, pasaría mucho tiempo hasta
que esto fuese aceptado. ¡Vida inteligente no divina en otro lado
del universo!, le era imposible calcular las consecuencias del
descubrimiento.
Carmen
estaba allá arriba del atril, pasándose la lengua por sus labios
para humedecerlos, pues tenía la boca realmente seca. Las caras de
los periodistas alcanzaban todas las dimensiones, formas, gestos,
expresiones, miradas varias y de todo tipo mientras la astrónoma
leía el comunicado. La ansiedad fue en aumento a medida que daba e
iba dando detalles.
-
Parar, tren, final, civilización, mercancías, guerra, llegada,
partida, una, doce, nación, tiempo- estas son las palabras, que con
más frecuencia se utilizaban en la comunicación de finales del
siglo XIX, que repetidamente hemos recibido durante las últimas dos
semanas – y tampoco en un ritmo constante, sino en un orden no
natural ni mecánico.
-
¿Vida inteligente?
-
Sin duda. Los algoritmos de las posibilidades colocan en el limite de
la imposibilidad que esta utilización del código Morse, sea
accidental. Son mensajes intencionales.
-
¿Otras civilizaciones?
-
Probablemente – contestó Carmen con una voz profunda y lenta.
El
silencio más profundo volvió a la sala. Nada del escándalo propio
de los periodistas pidiendo en voz alta explicaciones e invadiendo al
locutor, no. Todo el mundo permaneció sentado y callado. Uno se armó
de valor.
-
Y ¿desde donde nos viene la supuesta señal?, ¿cómo nos podremos
comunicar?, ¿sabemos algo del origen de esta?
Carmen
se subió los cuellos de la chaqueta de tela blanca de trabajo, se
aproximó al micrófono, y en un supuesto ataque de valor, le dijo al
periodista.
-
Señores, señoras, vayan ustedes olvidándose de la palabra
supuesta. Es un mensaje con la intención de establecer comunicación
con nosotros. Viene del planeta, que hemos bautizado como Menhir, por
su forma, y en la estrella, que tiene como nombre propio, Diancopia,
por su reflejo en onda corta. Esto es una pequeña y cercana galaxia,
formada por apenas unos miles de estrellas más y bastante cercano, a
unos 12 años luz, es decir, varios billones de kilómetros. Todos y
absolutamente todos los datos técnicos del asunto Menhir, son y
están publicados en nuestra página de Internet, todo el mundo debe
y debe de tener la posibilidad de acceder a ellos, a los datos
puramente técnicos, eso si, sólo serán interpretables por
expertos. El asunto de dar una respuesta a este mensaje, hacerles
entender que aquí, en nuestro planeta llamado por nosotros tierra,
también hay vida inteligente, es un tema de máxima urgencia e
importancia y para ello, habrá que poner de acuerdo a a todo el
mundo – me refiero explicita y concretamente- a todo el mundo a
trabajar para mandarles el mensaje, pues cómo y qué, hay que
decidirlo y debatirlo.
Los
periodistas ya habían encontrado material suficiente para hacer sus
reportajes, ahora bien, igual que Andrés, Pedro, Carmen y el resto
de astrónomos y autoridades conocedoras del asunto, deberían estar
algunos días para hacer la correcta digestión del asunto.
Antes
de acabar y sin que hubiera ninguna pregunta más, Carmen volvió a
tomar la palabras.
-
Señores y señoras periodistas, sean, por favor, conscientes del
impacto que puede significar esta noticia a nivel publico. Es la
mayor y la que va atener mas repercusiones de todas las noticias de
la humanidad. En sus manos y las nuestras estará el deber de hacer
las cosas con cautela y no acabe esta noticia, y muy fácil que así
sea, en desordenes y luchas.
Los
periodistas fueron, tras el aviso del fin, saliendo poco a poco de la
sala. Ni siquiera comentaron la noticia entre ellos, hasta que
comenzaron a bajar las escaleras que les llevaba a la puerta de
salida.
Aun
habiendo, con el trabajo de todos los países, reduciendo bastante el
efecto invernadero y se iba de camino a su total desaparición, los
efectos existían y el calor era agobiante, allí, en las Islas
Canarias, al salir, un minuto de las grandes superficies aclimatadas.
Con su auge máximo en el 2050 y la necesidad de urgente de su
solución, la reducción se convirtió en un hecho potencial, pero se
seguía luchando contra el efecto invernadero. La necesidad en la
búsqueda de algún tipo de energía limpia, les llevó a estudiar la
tercera fuerza configuradora del universo, la electromagnética. Con
sus primeros descubrimientos en sus aplicaciones y viendo sus
posibilidades, fue el centro total de estudio físico, pues podía
ser una fuerza que cambiara totalmente el mundo energético. Y además
tenía una propiedad fundamental para cualquier asunto relacionado
con la comunicación por su velocidad de trasmisión. En ella
deberían de trabajar y estudiar la forma y manera de la respuesta.
Ahora bien, como ya se había comentado entre los tres Astrofísicos,
concreta lo físico iba a resultar más fácil, que el contenido a
trasmitir, donde las dificultades fueron máximas.
Carmen
salia de la sala de prensa y se dirigió directamente hacia donde
estaban Pedro y Andrés. Sin pausa de continuación, le dijo Andrés.
-
Vengo de hablarlo, planearlo y discutirlo. Este mismo Viernes, van a
llegar aquí, representantes del grupo especial de la ONU, para ir
planeando y construyendo la respuesta.
Andrés
tras decirlo, bajó la cabeza y respiró con profundidad.
-
Carmen, Pedro, tomémonos un día de descanso. Nuestra cabeza va a
reventar de trabajo y nuestro corazón de emociones. Estamos a Sábado
tarde, el Lunes, por la mañana, vamos preparando todo para el
Viernes de la llegada.
Los
tres asintieron mutuamente y tras unas palabras se despidieron.
Del
observatorio, Andrés tenía treinta minutos hacia su casa, de
madera, material más buscado desde la aparición de las extensiones
de cultivo especiales de crecimiento rápido. Con la concienciación
mundial de la protección y cuida de los arboles y la facilidad para
crear nuevos bosques en unos plazos mucho mas bajos que en la
antigüedad, se utilizaba bastante para construir debido al gran
aumento de la masa forestal a nivel global. Le era muy agradable
entrar en su pequeña y cómoda construcción. Colores acogedores y
sin reflejos metálicos, ningún tipo de laca,y de madera tratada con
aceites. No contempló, al entrar, nada más que el sillón de lana
curtida y enlazada y en ella se sentó de manera cansina pensando que
su padre todavía estaría riéndose todavía y su madre rezando el
rosario, pero no por otra cosa, que por él y las cosas que decía.
Cap 3
Los
coches de tres espacios aparecían subiendo, como torpes caracoles,
por las curvas, cerradas y caprichosas que les llevaban hasta el
observatorio.
Ya
hacia unos años atrás, todo aquello, había sido construido y
reformado y tenía a continuación las grandes instalaciones y salas
de trabajo, donde estaban, Andrés, Carmen y Pedro, esperándoles.
Bajaron
de los coches al compás en el que iban llegando.
La
Unión Europea, los Estados Unidos de América del norte, la Unión
de América del sur, dirigentes de la China democrática junto a
Japón, representando a los países asiáticos, Rusia y Australia y
un observador de la incipiente creación de la Unión de Estados
Africanos.
Ocho
mujeres y seis hombre caminaban, sin relax ni comodidad hacia ellos.
Allí
y entonces todos sabían de la importancia total que iban a tener
esas reuniones.
Al
momento en el que quisieron darse cuenta, cientos de folios, en
Ingles, recorrían la mesa de trabajo en todas direcciones.
¿Qué
era lo que nos definía?
¿Qué
le queríamos contar de nosotros?
¿Cómo
englobar nuestros principios formadores de todos los habitantes de la
tierra?
¿Qué
símbolos metafóricos, interpretables o directos les enviaremos?
¿Cuando,
donde, cómo?,
Debido
al pequeño y reducido grupo necesario ¿Qué equipo y quienes
confeccionarían el mensaje para tomar decisiones? así y más.
El
mandar un mensaje en el cual pudieran englobar toda la esencia
formadora del ser humano y su manifestación en la realidad de siglo
XXI, se mostraba difícil y complicado, pero todos, absolutamente
todos, sabían de su importancia y dejaron a un lado sus intereses
propios pues sabían que esto afectaba a todos en el mismo nivel.
Tras
dos años de trabajo se compuso unos datos representativos. Fotos,
textos, formulas, técnicas, ciencia, mapas, mensajes, conocimientos,
historia, arte y filosofía.
Se
trató de trasmitir un mensaje de bienvenida partiendo de los códigos
del Morse trasformados en imágenes y símbolos formativos de un
lenguaje.
Andrés,
Pedro y Carmen, estaban y participaron en todas estas reuniones.
El
estupor, la humildad, la impresión, el retraimiento propio al estar
ante los representantes de tal alta alcurnia, quedo en nada cuando
fueron conscientes que iban a ser los científicos, lingüistas,
filósofos, ingenieros y demás los que mandaban y actuaban. Ya no
entraban en las salas con cara de inocencia hacia los diferentes
representantes burocráticos e incluso les corregían y enfadaban
cuando repetían el error en base a su poco comprensión sociológica,
comunicativa, técnica o lingüística.
Dos
años de trabajo en los que el sol pareció no aparecer nunca en sus
vidas.
Cuando
el mensaje fue codificado en las posibilidades de las ondas
electromagnéticas con las cuales podían ser mandados, lo fueron y
el silencio se hizo dueño del lugar.
Con
las letras en la pantalla anunciado la correcta realización del
proceso, cinco minutos de contemplación hacia la pantalla fueron
necesarios, para que todos los técnicos, científicos y humanistas,
volvieran a tener conciencia de la realidad y saliesen de aquello que
todavía, en ocasiones les parecía un sueño.
El
mensaje tardaría, con total seguridad, 19 años en llegar al planeta
Monolito, no sabían cuanto tardaría en llegar su respuesta, en el
caso de que la hubiera.
Esa
misma noche, los tres científicos y compañeros, se fueron, ya por
fin, relajados a cenar.
La
noche era clara y fuera de toda contaminación luminosa, en la
terraza del restaurante bien pagado por los científicos de
diferentes países, pero por ello mismo, tranquilo, apartado y
solitario en una pequeña aldea cercana, se relajaron y conversaron.
-
Y la tierra, la gente y la organización, ¿habrá cambiado mucho
cuando llegue, si llega su respuesta?, recordar que trabajamos en un
descompas temporal?, pensar en lo que han cambiado las cosas desde
los finales del siglo XX o los del siglo XIX, cuando les llegó
nuestra primera información.
Carmen
se incorporó ligeramente. Era una mujer hermosa, de cabello negro,
opaco, liso y largo. Sus ojos eran exactamente igual y urgían la
atención cuando los ponía sobre cualquier persona.
-Mira,
Andrés, llevo dos años, hablando, planificando, dialogando,
comiendo, durmiendo, trabajando, todo y de todo, conforme a esa
temática. ¡cambiala!. Hablame del hijo que esperas, pues, veo que
tú si que tuviste un rato, no sé cuanto, hace ocho meses en el que
olvidaste este, llamémoslo, problema.
-
Sí, Carmen, todo va fenomenal. Al parecer, yo no quería saberlo
hasta el momento del parto, pero accidentalmente me he enterado, voy
a tener una niña – le dijo con una franca y tierna sonrisa.
-
Que tendrá unos 20 años cuando llegue la respuesta, si llega –
dijo Pedro, aguantando la mirada de corrección de carmen.
Fueron
capaces de olvidar durante la cena el asunto y al encontrar el relax
que habían perdido dos años acompañado de una buena botella de
vino, tuvieron una velada estupenda y llena de risas, muchas risas.
Como
habían bebido, alquilaron, los tres unas bicicletas y volvieron con
ellas a casa.
El
cielo resplandecía con gratitud de su conocimiento. Al llegar a la
puerta de su casa, apagó la luz exterior y se sentó a disfrutar del
dulce y pequeño mareo del buen vino de Requena. Se iban, por
necesidad a tomar una semana de máximo relax, hasta reencontrarse el
lunes de la próxima semana. Habrá que estudiar que hacer si algo
pasara.
¿Cambiará
mucho nuestra vida?, ¿recibiremos datos y conocimientos que moldeen
nuestra existencia hacia el cambio radical?, ¿tendrán alguna
aplicación sus pensamientos y datos o la diferencia será máxima y
sólo tendremos, la ya enorme noticia, de otras inteligencias en el
mundo?, ¿estaré todavía trabajando aquí aquel día en el que
llegue la supuesta respuesta? Sus ojos comenzaron a cerrarse entre la
agradable frescura de la bella noche bajo las estrellas e
imaginándose corriendo por los pasillos del observatorio al recibir
la respuesta.
Cap 4
Habían
pasado ya, 32 años desde que se mandó aquel mensaje.
La
emoción diaria, fue pasando a la esperanza anual y a la desidia con
cada decena que pasaban.
Pedro
ya se había jubilado y hacia varios años que ya no estaba, siquiera
en las Islas canarias.
Carmen
y Andrés seguían allí.
Las
condiciones en las cuales se había redactado el primer mensaje
habían cambiado.
La
energía era básicamente renovable. Aire, agua y electromagnetismo.
El
orden global en la tierra, en los ya finales del siglo XXI, estaba
muy normalizado.
La
fuerza fue utilizada en busca de la paz a nivel global para ello,
pero partiendo de la unión de todos aquellos países que así la
buscaban. La utilización de la alimentación genérica y trasgénica
daba de comer, con absoluta salud y validez a todo el mundo, en el
cual seguían habiendo diferencias pero de una forma mucho mas
pequeña y leve que digamos, a principios del siglo XXI. La comida
natural existía, pero era como un buen vino de principios de siglo,
es decir, se disfrutaba y saboreaba. La alimentación estaba, por
ley, al total alcance de todos de manera gratuita y la máxima
calidad de ella, es decir, la criada y cultivada en pequeñas huertas
propias, como disfrute, había que pagarla. El que quisiera y
pudiera, tenía unas lechugas, Calabacines y Pimientos, digamos,
plantados en la parte trasera del, también afortunados, pequeño
adosado con pequeño jardín.
El
paladar de Andrés era muy poco, poquísimo exigente y desde hacia 20
años, cuando se instauró la alimentación generalizada a nivel
mundial, no gasto ni un Carquio, que era la moneda a nivel mundial,
por comer.
Lo
único en lo que la humanidad no sólo no había mejorado, sino que
habíase sido dejado atrás debido a la inestabilidad en las
convicciones y al aumento de la investigación materialista, eran los
conocimientos de las letras en la juventud. Andrés, seguía buscando
un pequeño pasado perdido entre las lineas de Quijote. Lo habían
comentado con Carmen. Pensaba que solo los mayores de 60, que ya
tuvieron unas mínimas enseñanzas, conocían con relativa completud,
las artes, literatura y filosofía clásica podrían trasmitirlo en
persona y no por el colegio. Pero Carmen estaba absolutamente
convencida que no se había perdido, de por vida, una solo línea de
todos estos conocimientos, pues almacenados en todo tipo de formatos
y que con toda fuerza, surgirían de nuevo.
Seguía
encantado con su trabajo en el conocimiento del cosmos circundante y
el la cartografiá de las galaxias posibles, pero su corazón seguía
criando y alimentando aquella respuesta que siempre no paraba de
amamantarla.
En
los finales del siglo XXI, la amistad y compenetración en el trabajo
de Carmen y Andrés era ya máxima. Trabajaban realmente agusto el
uno con el otro y confiaban plenamente en sus conocimientos
respectivos.
Andrés
tenía dos hijos, dos hombres, y éstos, tres cada uno, hombres y
mujeres. Se había casado con una mujer de la isla, María, y tenían
un matrimonio estable y bueno. Vivían toda la familia, en la ciudad
de Tenerife, aunque seguía durmiendo algunas noches en su casita de
madera, la cual había cogido más cuerpo y espíritu con el paso de
los años.
Carmen
nunca se casó. Vivía para y por la ciencia. Le satisfacía, le
llenaba, le daba tranquilidad y necesitaba poco más. La familia de
Andrés era la suya también.
-
Andrés, ¿has procesado las últimas variaciones magnéticas
provenientes del la galaxia OrioB345?
-
Sí.
-
¿Algo especial?
-
Sí, el proceso de expansión alcanza unas cuotas mayores.
-
Esto nos lleva a una disminución desde el momento de la
concentración en el punto primero e inicial.
-
Sin duda.
-
Habrá que poner esta noticia en conocimiento del circulo Europeo de
investigación.
-
Sí, mañana.
-
Andrés – le dijo Carmen, mirándole con cara de ternura- mañana
es mi cumpleaños, 68.
-
No¡
-
Sí¡
-
Y ¿qué vamos a hacer? - le dijo Andrés guiñándole el ojo.
-
Nada, estoy un poco agotada. Quizás necesite algo más de vidilla.
Sigo enamorada de mi trabajo, pero..
No
acabó la frase, Andrés sabía que los planes y proyectos de la
antigüedad la habían alejado bastante de la vida social. Sus Padres
habían muerto ya y su único hermano, vivía en la península.
Quizás, la soledad que las estrellas antes llenaban, crecía en
demasía.
-
No,no, no Carmen. Mi mujer nos hará una enorme tarta de chocolate,
que nos comeremos en mi casa. Voy a reunir a toda mi familia, para
que por orden de estatura – se giró riéndose- pasen a
felicitarte.
Paseaban
por los últimos pasillos, camino de la puerta de salida y apagando
las luces, cuando detrás de una puerta que hacia tanto tiempo que no
habrían, comenzaron a sonar, unos leves pitidos de actividad. No
reaccionaron ninguno de los dos. Apenas se miraron. Pero la mirada
continuó y continuó a la par que sus ojos se iban abriendo con
emoción.
-
Andrés, es la sala especial del asunto B56 – La comunicación-
-
Sí, lo sé – le contestó ante la imposibilidad de quedarse
callado.
Diéronse
la vuelta con rapidez y habiendo rejuvenecido quince años los dos,
fueron, como si perdieran el autobús de su vida, hacia esta sala. El
aviso se hizo más claro y patente. Había actividad en aquel lugar
que dejó de haberla hacia ya más de treinta años. Abrieron la
puerta. La sala estaba en perfectas condiciones, mantenido por los
equipos propios de cuidado, aunque la maquinaria era ya antigua.
Se
acercaron los dos a la pantalla y el canal seguidor del mensaje hacia
el planeta Monolito daba señales. Se cogieron de la mano. No
hicieron ningún comentario y se sentaron en las banquetas que
durante tanto tiempo habían sido sus asientos llenos de
convicciones, ilusión, trabajo y convivencia. No dijeron ni una
palabra técnica, ninguno trato de dar ninguna suposición o base
interpretativa. No esperaron descodificar ni comprobar nada. En sus
caras había una gran sonrisa, de satisfacción, de melancolía
agradable. En un segundo todo su trabajo cobró validez.
Se
levantó del asiento Andrés, el cual tecleó el código de
emergencia en la puesta en marcha del protocolo conveniente.
Llamarían a Pedro. 30 y muchos años habían sido mucho tiempo y
Andrés, ya con 69 años, esa noche no tenía ganas de más ciencia.
Salieron contentos, sonrientes, relajados, dispuestos a mañana, con
tranquilidad continuar el trabajo. Se dijeron que de momento, ni una
palabra al mundo entero, pues si no, de inmediato, estarían allí la
mitad de los dirigentes a nivel mundial.
-
Yo no me lo creo todavía – le dijo Andrés.
-
Yo plenamente – le contesto carmen- es el regalo y el premio a mi
trabajo
Se
sonrieron y abrazaron los dos.
Carmen
le llevo a su casa y allí le dejo.
-
Como cambia la vida en dos minutos, Carmen.
-
No Andrés, no, será la tuya, pues esta información lleva viajando
de una parte a otra del espacio ya casi treinta años.
Arrancó
el coche
-
!Ah¡, Andrés, tráete la antigua bata del observatorio para
comenzar el trabajo mañana por la mañana como yo haré
La
incredibilidad que sentían de la noticia, les dejó dormir con
tranquilidad aquella noche.
La
noche, con calma y tranquilidad, transito por el cielo de la isla
hasta la mañana siguiente.
Cap 5
Iván
Boris, inclinado hacia la mesa, mirando el folio, en la semioscuridad
y silencio de la sala, no tenía más conciencia del mundo que lo que
estaba leyendo.
Nació
en Ucrania, pero pronto los avatares de la vida le llevó, con su
familia, a la península y después a las islas Canarias, Tenerife.
Tenía
35 años, ere un hombre joven ya, con un montón de experiencia,
titulaciones y premios en su campo de trabajo.
Era
astrofísico.
Serio
y ordenado, tanto que todo improvisto fuera de lo planeado, le
alteraba.
Se
esperaban noticias increíbles, desde el momento en el cual se
comenzó a realizar la traducción, pero no de tal tamaño.
El
mensaje estaba codificado de la misma manera en la que fue mandado,
algo anticuada por el paso necesario del tiempo en el viaje, pero no
hubo ninguna dificultad para traducirlo.
Estaba
trabajando allí, en el observatorio hacia ya seis años. Vino cuando
Pedro lo dejó.
Eficaz,
eficiente, responsable, con muchos conocimientos en el campo de la
trasmisión del las ondas electromagnéticas y una gran capacidad de
trabajo, pero ordenado, demasiado ordenado. En los primeros tiempos
tuvieron algún pequeño enfrentamiento. A Andrés era realmente
difícil enfadarle pero a Carmen si, pero no por el orden exagerado,
si no lo era ella más, si no porque no le gustaba que nadie
invadiera su lugar de trabajo con sus maneras y formas. Pero pronto
se pasaron y su trabajo continuó con mucha normalidad. Por la
naturaleza, ritmo y afinidad de los componentes en su trabajo, pronto
tuvieron una buena relación.
Carmen
abrió la puerta con fuerza. A sus casi setenta años, tenía una
enorme energía.
-
¿Berilio y Estroncio?,¿Seguro?
-
Carmen, ¿te das cuenta del impacto vital a nivel mundial que tiene
este mensaje?
-
Sí, Iván, tengo bastante más consciencia de este asunto, pero no
sólo de éste, sino de muchos más – le dijo enderezándose y
señalando con el dedo hacia el techo y con cara tensa- empecemos
ocupándonos de lo nuestro, poco a poco – le decía mientras
trataba de relajar su expresión-, el mundo se va a enterar muy
despacito. El mensaje es convulsibo y muy fuerte y se lo voy a
dosificar, al mundo, con precaución – dijo rejuvenecimiento 30
años.
-
Si, Carmen – sin alterar su expresión como casi nunca lo hacia-
nos cuentan que su forma de desarrollo no está basada en una forma
líquida formada por Oxigeno e Hidrógeno, sino en Berilio y
Estroncio.
-
¿Explican como?
-
La fuerza nuclear no es estable allí, en Monolito como en la tierra.
La materia está en continuo cambio de estructura. Una roca se te
diluye en agua pues no existe esa fuerza que mantiene unidos los
átomos que forman las diferentes estructuras. Ellos – la miró con
cara de imprecisión y mascando un pequeño gesto con el labio
inferior- nacieron tras la expontaniedad de un rango mayor de fuerza
nuclear en los átomos del Berilio y el Estroncio que permitió unas
formas estables. No hay agua, pero si movimiento que es la
posibilidad de la vida. A saber la vida que tenemos a nuestro al
rededor habiendo buscado siempre agua.
El
mensaje era corto, concreto y conciso. Es más, estaba estructurado
como si fuera un trabajo de colegio. Tenía titulo, tres puntos y
despedida.
En
el titulo ponía LA COMUNICACIÓN.
En
el primer punto nos desarrollaba su forma de vida física y los
principios de funcionamiento de ella, sus formas, sus capacidades, su
tecnología, la vida en un mundo en continuo cambio, su forma de
trasporte, sus conocimientos astronómicos, leyes de funcionamiento a
todos los niveles, le dieron una increíble situación del planeta
tierra en una totalidad cósmica inalcanzable para los conocimientos
humanos de entonces. Un conocimiento técnico y científico muy
superior.
En
el segundo punto nos transmitían una serie de dudas sobre términos
que no comprendían en los mensajes.
En
la primera lectura que hicieron, tras la increíble emoción de
admiración, sorpresa, grado, alegría en la recepción esos
conocimientos científicos, técnicos, físicos y los caminos de
investigación y conocimientos que volaban sobre el horizonte, vino y
siguieron unos momentos de gran silencio ante una vergüenza total y
una pregunta consecuente, sentido y plantada por cada uno de ellos,
cuando comenzaron a las siguientes lineas.
Estas
hablaban de las dudas sobre los significados de 68 palabras que
habían encontrado en nuestro mensaje y que no eran capaces de darles
cabida ni traducción en sus ámbitos, maneras, formas o
conocimientos de su realidad y experiencia, vital. Eran algunas tales
como guerras, asesinatos, venganza, odio, holocausto, abusos,
violaciones y una serie de palabras parecidas. Si que entendían el
contenido de sus actos, pero no sus elementos formadores, ni sus
razones, ni sus elementos provocadores, ni las circunstancias
necesarias y otras circunstancias justificadora de cualquier acción.
Eran incapaces de entender cualquier acto que no fuera constructivo
en la formación de su grupo, que utilizando nuestros términos,
llamaban social. Dejaron inmediatamente de hacer especulaciones sobre
las consecuencias metafísicas de concepción de su vida y temas
similares cuando se vieron subiendo por las escaleras hacia el
precipicio.
Andrés,
llegó algo más tarde y dejó la hoja, exhibiendo sus ojeras, encima
de la mesa. Y dijo sin más
-
Ya me has dicho Carmen que vamos a estudiar la parte técnica y
física del mensaje con locura y afición, que vamos a conversar
interminablemente con el asunto de los términos que no conocen, pero
no me iré de aquí, ni nadie se irá, hasta que no decidamos que
hacemos ante el tercer punto del mensaje.
-
Sí – dijo Carmen- pero decidamos lo que decidamos, mañana lo
repasaremos y pasado también y comenzaremos a hacerlo publico por
partes y poco a poco aludiendo a problemas de trasmisión.
-
¡Carmen, Carmen!, ¡por favor!, ¡dentro de seis años estarán
aquí!
Debido
a la ligera unión de sus partículas formadoras podía acelerarlas a
la mitad de la velocidad de la luz. Haciendo y transmitiéndonos unos
cálculos totales, absolutamente correctos, dentro de seis años,
tres meses y catorce días, vendrán, estarán aquí, tendremos
comunicación directa.
Continuó
-
Todo, todo, absolutamente todo va a cambiar, ¿qué hacemos?
Cap 6
Dos
días de la traducción y ya debían de tomar decisiones y tener
acciones.
Enajenado
y estranbótico, masticaba ideas, el pensamiento de Carmen, mientras
ésta, deambulaba por el pequeño balcón que bordeaba toda la parte
superior, alrededor, de la bóveda-cobertura del telescopio del
observatorio.
Hacía
ya más de 30 años, cuando se supuso el contacto con algún otro
tipo de inteligencia interestelar.
Las
repercusiones, entonces, fueron tremendas a nivel mediático. Fue un
golpe muy duro para todas las culturas existentes y el desconcierto
se extendió. En unos grandes esfuerzos a todos los niveles, la
estabilidad y normalidad se recuperó, es más actuó como
catalizador del proceso y la mejoría a todos los niveles se
incremento.
La
información que sólo ella y dos más tenían, potenciaba al máximo
las repercusiones a nivel mundial de este tipo de asuntos.
Estaba
emocionada e interesada como científica, pero también nerviosa y
preocupada como persona.
Se
paró, se giró y apoyó las manos en el borde del balcón.
-
No sólo hay una vida más inteligente y avanzada que la nuestra, si
no que !además vienen! - hablaba con Iván que pensativo la
acompañaba en su espalda-, !ahora, con mis 68 años y con la
intención de irme a casa a descansar, llega a mis manos la mayor
noticia en la historia de la humanidad¡. Bien, bien, llamaré a
todos nuestros compañeros y decidiremos.
Había
estado hablando con las estrellas mientras Iván dibujaba figuras
geométricas muy precisas en una pequeña libreta, mientras, absorto,
andaba detrás de Carmen.
Ésta,
tenía el cabello canoso, pero fuerte, liso, cortito que le daba
juventud. Iba vestida con una chaqueta azul de tela gruesa en
contraste con una camisa blanca de ondulados cuellos. Era mayor, sí,
pero estaba guapa y elegante.
Volvió
y en el camino de éste, paró otra vez su mirada, hacia la
dirección, respecto a las estrellas circundantes, que ocupaba la
planeta el planeta Monolito desde el qué había salido algún tipo
de seres inteligentes que venían - espero que a vernos- suspiró,
largo y profundo entre estos pensamientos.
Se
intercambiara gestos y Carmen no cerró la puerta de salida, allí se
quedaba, Iván, como siempre haciendo geometría.
Al
llegara la sala principal, se encontró a Andrés. Era ya la noche
bien entrada y allí estaban todos todavía.
Durante,
al menos, dos minutos y mientras Carmen iba al otro lado de la mesa,
buscando la máquina de café, se mantuvieron la mirada esperando
noticias o comentarios de cualquier índole, entre el uno y el otro.
Tras
el siglo más sangriento y cruel de la humanidad, siglo XX, vino uno
difícil, duro, pero se había luchado consiguiendo estados sociales
y posibilidades tecnológicas impensables, ya a finales de éste.
El
siglo XXII, llevaba el mismo camino, hacia la mejoría, pero
potenciado. La tecnología y el acuerdo todo lo invadían.
-
Todo puede cambiar, Andrés, y dudo que sea a mejor – dijo Carmen
rompiendo el silencio establecido.-
-
Por qué Carmen? - le pregunto sin tono en su voz. La noticia le
pesaba.
-
Si traen cosas beneficiosas o problemas, inmediatamente romperán el
equilibrio que tantos siglos nos está constando construir.
-
Demasiados – apuntó Andrés.
-
He seleccionado a todos los compañeros a los que yo creo que debemos
mandarle la noticia e insistirles en la necesidad de su presencia
inmediata. Hazte una lista, revísalos y con los que elijamos,
comencemos a trabajar ya. Planes y fechas.
-
Sí, Carmen, ya lo he hecho, confeccionado la lista – le dijo
sonriendo con amabilidad- para tratar de de disimular sus profundas
inquietudes que le invadían.
Cap 7
Uno Americano, dos Rusos, Una Japonesa, Una Alemana y el último, un
Argentino.
Allí estaban, junto a los dos Españoles y en aquel, ahora sí que
perdido, lugar en Tenerife, mirándolos con caras difíciles de
interpretar.
No era una locura, después del primer contacto, hacia ya treinta
años, pero no conseguían ninguno creerse que viniesen. Repasaron,
estudiaron, comprobaron el mensaje, una , dos, tres, hasta que
Andrés, esbozando un Ingles bastante peculiar, que todo había sido
comprobado. En este impás, Carmen miró con corrección a Andrés y
se levanto en aquella mesa de mentes privilegiadas.
- Tenemos en nuestras manos un punto de máxima inflexión en la
historia y concepción cosmológica, que incluye al ser humano como
parte de éste – el Ingles de Carmen, por su abundante utilización
era muy fluido y con una pronunciación Americana por sus contactos
científicos- vamos a irnos casi 50 años atrás para construir los
acontecimientos y, esto es lo más importante, a ver como se trasmite
y se cuenta. Si no lo hacemos correctamente, esta noticia puede ser
el pistón de muchos, demasiados problema. Nosotros somos un grupo de
científicos que estamos, quizás algo vacunados contra estas
noticias tan asombrosas pero la gente de la calle no.
Otta, la científica Alemana, cuando todos callaban sorprendidos y
meditando preguntó
- Así que habéis que su materia compuesta por Berilio y Estroncio y
debido a la inexistencia de la fuerzas nucleares, y su constante
organización y alcance de la forma determinada, la trasformación en
otras formas era viable, con lo que se pudiera acercar a este
compuesto a una materia cargada de energía, a mitad de la velocidad
de la luz, para reconstruirla después ¿no?
- Sí.
- Pues vayamos buscando otra solución y origen al mensaje. Esto es
imposible.
Ninguno quiso discutir. Nadie había venido a eso. Walker, alzó su
leve voz, que parecía más bien, un conjunto de suspiros.
Y si ya tenemos comunicación. ¿por qué no se ha establecido un
dialogo en vez de un monologo?, con su alta tecnología hubiera sido
posible.
El silencio se hizo de nuevo.
Todo el mundo se volvió, como el minuto anterior y el otro más
anterior de la trascendencia de las circunstancias.
Y Andrés habló.
- No podemos, ni debemos comunicar nada a nadie.
- ¿Qué dices? - le preguntó sorprendida Carmen – y en Español –
lengua que entendían y mal hablaban todos.
- Explicate – le insistió Xaqui, el científico Argentino.
- Mejor que el mundo se quede en el sinpas y en la sorpresa de la
visita directa de ellos, si no, las revoluciones a todos los niveles
serán imposibles de dominar – completó Andrés, bajando la cabeza
en signo de resignación.
- A los 150.000 km por segundos de su trasporte, será imposible
localizarlos, como presencia física, por ningún equipo, si no son
tales y como los tenemos aquí, sí Andrés, pienso como tú – dijo
mirándole con dureza, Xant – directamente venida de Peking
- ¡Qué decís! - dijo algo alterado Dostrais – Moscovita- !cómo
ocultar esta noticia, el mundo debe estar preparado para ella¡
- ¿Y qué hacemos?, - Andrés dijo también levantando un poco más
el volumen de su tono- ¿preparan los discursos de bienvenida?,
¿organizar los arsenales militares?, ¿prepararnos para qué?, sólo
valdría para tener al mundo en un estado histérico durante seis
años.
Vladimir, venido de San Petersburgo y el más anciano de todos, sin
subir un ápice el tono de su voz les dijo
- Cierto todo lo que estáis diciendo todos, pero Andrés, Dostrais,
Xant, no es una decisión que debamos de tomar nosotros, sino la ONU.
Andrés se puso de pie y comenzó a circular al rededor de la mesa.
Carmen le miraba con preocupación y complicidad.
- No sois conscientes de lo que decís – la cara de sorpresa se
hizo colectiva – no estamos preparados, los habitantes de la tierra
para ello – aun a sabiendas del peligro y la disfuncionalidad de
sus palabras les continuó diciendo - no hay ningún telescopio
parecido y con las mismas posibilidades que éste, más la
información necesaria para darle sentido a las posible señales que
vinieran. Convencerme si queréis que esta información salga de
aquí, pues las llaves las tengo yo.
Jhon, el otro Americano golpeo la mesa, le dijo
- No, Andrés, esa información no te pertenece, es de toda la raza
humana en general.
- Sí, Jhon, pero no quiero ser responsable de las muertes y
revueltas por ella producida por hacerla pública cuando no
correspondía – se miraron, sin odio, sin violencia, pero muy
fijamente y con mucha intensidad-
_ A ver, a ver, tranquilicémonos todos. Es nuestra primera reunión.
Volveremos a repasar los datos, buscando errores, interpretaciones y
demás. La sorpresa y el cansancio nos impedirá tomar ninguna
decisión correcta, así pues vayámonos a descansar y mañana
continuamos.
Despacito, con paz, orden y complicidad, fueron saliendo, en silencio
de la sala. Cambiaron algunas palabras totalmente triviales habiendo
concertado una reunión para mañana a las 10 am.
Andrés y Carmen habíanse quedado a cerrarlo todo
- Pero, Andrés, ¿ha que ha venido esa negativa e imposición?,
sabes que estos datos no son tuyos, son de interés mundial y que
sería posible, aun con tu negativa, llegar a ellos, ¿no pensaste en
mi y mi opinión?, jamás te había visto tan taxativo.
- Algún momento debía de llegar. Que el mundo se entere solo cuando
ya no le de tiempo a tener ningún cambio radical y esperarlos con
paciencia. ¡Qué haremos Carmen, qué!
Salieron andando despacito del observatorio. Habían hecho venir al
coche oficial que jamás utilizaban y cambiaron el rango de la
conversación, sin ningún problema, a sabiendas de la imposibilidad
de deducción del problema que conversaban por la especificación
temática.
- Y ¿qué forma tendrán?, Berilio, Estroncio, fluido, dinámicos.
- Aun poniendo, no ya mi ciencia, sino también mi imaginación, no
consigo encontrar ninguna respuesta.
Parecíase como si fuera el segundo día después del que se
conocieron en el observatorio, pues todo lo anterior a esto cadecía
de total y absoluta importancia.
Cap
8
Faltaban
8 meses para la supuesta venida de estos elementos extraterrestres.
No
sabían como llamarlos, que eran ontológicamente, salvo que tenían
lo que aquí llamaríamos inteligencia.
No
se atrevían, siquiera a darles un nombre propio.
No
habían vuelto, tras aquellas discusiones sobre sus compañeros a
realizar ningún tramite investigador sobre el asunto, por la
necesidad de discreción.
Concluyeron
y la experiencia posterior le dió la razón, que era mejor estar
callado hasta la cercana llegada de lo que fuera que iba a venir.
Tras
un acuerdo tácito y desde la lejanía con los demás científicos,
le dieron a Boris, un hombre serio y que daba, inevitablemente, toda
la imagen de veracidad y validez de todo aquello de lo que hablara,
que diera la noticia al mundo entero. Además, Carmen y Andrés,
estaban ya mayores para llevar todo el peso de las impresionantes mil
explicaciones que debía de dar.
La
noticia fue trasmitida a todos los diferentes dirigentes de las
distintas unidades territoriales continentales, los países como
tales ya eran una nomás que gran manifestación cultural, y al
publico en general por los medios de comunicación globales y
digitales.
El
caos fue total allí y donde fuere.
El
desorden y la perdida de los horizontes se hizo palpable.
Andrés,
dentro de su preocupación e inquietud máxima, sentía su bien
actuar cuando impidió que ni una sola linea del informe de su
llegada saliera del observatorio hasta 8 meses antes.
Todas
aquellas ideas que habíanse construido llegando a posturas conclusas
en generalidades aceptadas por todos, se fueron echando por la borda.
La
diferentes religiones, retomaron sus diferencias, esas que había
constado más de un siglo de rasurar.
Las
diferentes agrupaciones, rompieron su tratamiento colectivo de los
problemas y la discordancia, en cuanto a los actos a realizar se hizo
patente y la desunión se hizo palpable, hasta el punto de romper
muchas de las relaciones absolutamente normalizadas que ya existían.
El
desorden social fue inmenso. Parecíase que llegara el fin del mundo
para unos, parecíase también, que llegara la salvación y el
abandono. La perdida de los valores de unión se perdieron en 7
meses.
El
caos y conflicto fue total.
La
visita, sin saber ni forma ni intenciones de inteligencias
extraterrestres, no pudo ser asimilada con racionalidad. Esto era
normal, evidente y comprensible.
En
Tenerife, debido a su aislamiento y su relativa pequeñez había
permanecido relativamente tranquilo. Las grandes ciudades estaban
pasando momentos realmente histriónicos y experpénticos.
El
abandono, huida, la violencia.
Hay
poco cosas que den tanto miedo como el desconocimiento.
¿Capacidad
de viajar a la mitad de la velocidad de la luz?
Una
superioridad tremenda a nivel tecnológico.
Un
primate usando piedras y los seres humanos actuales con armas
atómicas. Ésta eran la diferencia que el asunto suscitaba.
Boris
había grabado un informe en el cual mirando a la cámara y con la
sobriedad y frialdad que le caracterizaban, explicó, de manera
brillante, rápida y comprensible los hechos y acontecimientos.
Todos
los miembros del observatorio permanecieron el primer mes en éste
recluidos ante la imposibilidad de salir.
Las
manifestaciones culturales, el deseo de información, la ansiedad de
noticias, las ganas del contacto, periodistas, políticos,
representantes de diferentes asociaciones, miles de personas se
agrupaban en las afueras y puertas de éste. La policía nacional y
la guardia civil tuvieron que proteger el edificio.
El
primer mes fue tremendo.
Andrés
y Carmen iban consumiendo muy rápido la poca energía que les
quedaban.
En
el séptimo mes, a uno de la supuesta llegada, el silencio mundial se
hizo patente, y el mundo dejo de funcionar, apenas había movimiento,
apenas habían servicios, productos y actividades, El mundo
permanecía en sus casas imbuidos en los medios de comunicación que
todavía siguieran funcionando.
Los
creyentes se prepararon en grupos colectivos, las sectas se
encerraron en sus centros, los políticos dejaron de actuar, por
civismo y responsabilidad algunos sistemas mínimos siguieron
funcionando.
El
punto de máxima inflexión, sino de desaparición del ser humano iba
a venir.
Los
que permanecían emocionados e ilusionados eran pocos, pero los
había.
Habían
cientos de miles que no veían un peligro el hecho de la existencia
de inteligencia exteriores, la puesta en contacto con ellas y la
construcción conjunta del futuro, es más, lo consideraban como una
posibilidad muy plausible y concebida desde el principio sino desde
tiempo anteriores.
En
este último mes la familia de Andrés se había trasladado al
observatorio. El telescopio apenas ocupaba un diez por ciento de la
superficie, pero era tremendamente grande el resto y la superficie
para vivir en éste, era realmente grande.
-
Ves Carmen, ves, ya te lo dije – le comentaba Andrés, mientras
daban las últimas vueltas rutinarias al rededor de la cúpula del
telescopio- el desorden iba a ser total, imaginate se hubiera habido
unos seis años de degeneración de las estructuras. No hubiéramos
estado preparados para recibirlos. Ahora lo estamos todavía, pues
las máximas instituciones a sus máximos niveles de responsabilidad,
siguen en perfecto uso y posibilidad. Estaremos en condiciones de
poder establecer el contacto con ellos, de acuerdo y con las maneras,
que ya conocemos que utilizan.
-
Sí, Andrés, cierto, ¡Cuanto razón tuviste, hiciste y
practicaste!, no era mi razón la que quería dar la noticia, era mi
moral que me impedía esconder semejante información. No fuimos en
ninguno momento dueños de ella.
-
No, no, sí que lo eramos y era una responsabilidad muy grande única
y exclusivamente nuestra.
Bajando
del observatorio con calma, vino corriendo la mujer de Andrés a
buscarles.
-
Corran, corran, Boris quiere hablar con Ustedes.
Los
dos, instintivamente se giraron mirando hacia el punto geográfico
estelar como llevaban tanto tiempo haciendo. Y sí, un pequeño
crepúsculo de luz había aparecido allá donde nunca hubo ninguno.
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